martes, 2 de noviembre de 2010

Sobredosis de testosterona

De Spreadshirts.co.uk
Así estoy yo leyendo los periódicos las últimas dos o tres semanas, con los estrógenos tan bajitos que se me pegan en las suelas del zapato y está empezando a salirme barba. ¿Quién necesita hormonarse cuando podría abrir El Mundo o El País o cualquier otro periódico y sentir como se le hinchan los huevos y no sólo metafóricamente hablando?

Yo no vi a Moratinos llorar, ni he buscado las imágenes después ¿para qué?. ¿A qué viene castrar a este señor, aunque sea una licencia literaria? ¿No es precioso que con la edad de este señor, con la carrera de este señor, se emocione al marcharse de un trabajo en vez de suspirar por la jubilación? A lo mejor es más emotivo dejar Exteriores que dejar Fomento, a lo mejor te toca la fibra sensible que de tu trabajo dependan la vida de cooperantes o pescadores de atún. No sé, yo no he sido ministra de Exteriores. Tampoco he vivido una guerra, así que a lo mejor no debería ni opinar ni tener un blog ni merecerme vivir. Pero a mí se me han saltado las lágrimas cuando me he despedido de compañeros, cuando me han largado de un trabajo y no lloraba por irme al paro, que es a donde me iba y fijo que ese no es el caso de Moratinos. Lloraba porque tengo corazón y me daba penita.

Yo me molesté con la historia de Japón. No me gusta que tilden a las mujeres, y menos a las niñas, de zorritas. Y menos por llevar minifalda y los labios pintados. Yo los llevo, desde hace años y no soy ninguna zorrita. Pero puestos a elegir, que me llamen ZORRA con todas las letras, que zorrita suena a quiero y no puedo -o peor- a quieres, pero tú a mí no me "enreas". Me molesté con la historia de Japón, pero me encabroné con la explicación. A lo mejor tenían dieciocho, pero yo me tomé la licencia literaria de borrarles cinco años en el DNI por añadir pimienta a la historia. Ea, vamos a decir que son niñas que así pone más. Con dos cojones. 

Y no puedo con las opiniones de los morritos de la ministra. Si a mí tampoco me gusta, si he leído muchas críticas y eso es lo que hay, que para eso eres un personaje público y ahí estás, se te ven los errores más que al resto, ¿qué le vamos a hacer? Seguro que lo asume y que se darían todas las ministras con un canto en los dientes si sólo escrutaran su trabajo. Después de oír las protestas por la ropa de la ministra de Defensa, de meterse con De la Vega (de la Vogue, dicen, los que no valen ni para poner un mote) porque les parece fea, porque el posado de Santa María no era apropiado... ahora vamos a cosificar a una mujer porque tiene la boca carnosa y grande. Y nos retractamos con la boca chica.

Y abren el burdel más grande de Europa en Cataluña. Voces a favor y en contra y yo no me posiciono. Pero sí me dan ganas de echarme a llorar de lástima del ser humano leyendo los comentarios de algunos lectores (lo de algunos es una manera de hablar para consolarme, eran multitud) que sostienen que sale más barato follarse a una puta que ligarse a una mujer que no lo sea. Como esto no sé si se entiende, porque yo no lo entendía, lo explico. Hay presuntos seres humanos por ahí que sostienen que la única manera de echar un polvo sin pagar directamente por él es gastarse una pasta invitando a cenas, a copas y a no sé qué más (que eso por lo visto ya es un capitalito) para que luego la señora en cuestión te engañe para casarse contigo con el único fin de divorciarse después para dejarte pelao. Pues eso significa, pero sigo sin entenderlo. 

Y Berlusconi opina que "es mejor mirar a una chica guapa que ser gay". Esto tampoco lo entendía, porque yo debo ser tonta y porque son frases que suena raro ponerlas juntas así, en una subordinada comparativa. Así que seguí leyendo. Este señor (presidente reelegido, tiene narices) hablaba de haber contratado a unas prostitutas para que bailaran ¿bailaran? Sí, bailaran. El bunga bunga concretamente. Una de ellas, que se sepa, menor de edad. Es decir, que este hombre quería decir que es mejor contratar a una prostituta menor de edad - para presuntamente mirarla -, que el hecho de que a un hombre lo atraiga otro hombre, aunque la atracción sea mutua, gratuita y entre dos adultos. 

Y lo peor, creo de las últimas tres semanas, el dominical de El País. Lo peor porque esos son los que mandan de verdad. Conocemos los consejos de administración de las grandes empresas de España. Busquen caras femeninas o una corbata de colores. Aquí dejo un magnífico análisis de Javi Alonso, que me ha recordado mi cabreo mañanero, porque yo no tengo cuerpo ni testosterona para seguir recopilando barbaridades. Ni siquiera para revisar este artículo, que está escrito con las tripas (revueltas).


Y por cierto, se me ha ido la mano en el título. Afortunadamente conozco muchos hombres repletos de testosterona que la emplean en querer mucho. A otros hombres y a otras mujeres. Debe ser que hay de dos clases, como el colesterol.